Los controles de seguridad convencionales suponían que los usuarios estarían dentro del perímetro de la red corporativa, lo que ya no es necesariamente cierto. Los datos de las organizaciones se están trasladando a la nube, los empleados trabajan remotamente y requieren acceso a las aplicaciones corporativas, como resultado el perímetro de la red tradicional se ha disuelto y se necesitan nuevos modelos de control de acceso, protección de datos y protección contra amenazas.
Secure Access Service Edge (SASE), término acuñado por Gartner en 2019, propone un modelo que unifica los servicios de red y seguridad en una arquitectura diseñada y entregada desde la nube para proteger a usuarios, aplicaciones y datos en todas partes.